La cooperativa láctea Conaprole busca revertir el fallo judicial en su contra relacionado con una deuda de más de 60 millones de dólares por la compra de leche en polvo por parte de Venezuela hace más de 9 años. El caso, que data del acuerdo firmado en 2015 durante la presidencia de Tabaré Vázquez, ahora se dirigirá a la Suprema Corte de Justicia.
Conaprole había insistido en no abandonar su reclamo contra el Estado uruguayo y la empresa estatal venezolana Corpovex, exigiendo casi 32 millones de dólares por la deuda y el resto por «daños y perjuicios». Sin embargo, el Tribunal de Apelaciones en lo Civil de Primer Turno confirmó a principios de marzo un fallo anterior que rechazaba la demanda por haber sido presentada fuera del plazo legal.
Gabriel Fernández, presidente de Conaprole, sostuvo que ambos países tuvieron un papel en el acuerdo. «Uno directamente debe la factura y el otro participó en la génesis de ese negocio», explicó Fernández, reafirmando que la cooperativa seguirá luchando por el dinero que «es de los productores». La deuda, según Fernández, es crítica en un contexto donde el atraso cambiario afecta severamente al sector lácteo uruguayo.
Por su parte, Venezuela ha rechazado cualquier responsabilidad, declarando que el país «no fue ni es parte de los contratos aludidos». Afirmaron que Corpovex, la empresa involucrada en el acuerdo, no representa a la República Bolivariana de Venezuela en este asunto. El acuerdo inicial implicaba la exportación de 44.000 toneladas de leche en polvo y 12.000 toneladas de queso por un total de 39 millones de dólares.





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